Se puede estar a favor o en contra de irlandeses o británicos en aquel largo y triste conflicto entre dos pueblos europeos que hasta hace relativamente poco tiempo ensangrentó el suelo y los verdes prados de las entrañables islas ritánicas, pero de lo que no cabe duda es del heroismo y entrega total de muchos militantes de la causa irlandesa entregada infatigable y despiadamente a la lucha por la afirmación de sus derechos e identidad y a la legítima recuperación de su destino histórico en la historia de Europa. Micheál Eoin Ó Coileaín, más conocido como Michael Collins, "Big Fellow", fue uno de ellos. Nacido en el seno de una familia de granjeros del condado de Cork con lejanos orígenes aristocráticos y simpatías nacionalistas. Autodidacta y brillante desde su niñez, trabajó como cartero en Londres, perteneció a la organización deportiva Atlética Gaélica y pasó a formar parte de la organización secreta Hermandad Republicana Irlandesa a la edad de 19 años. En 1916 participó activamente junto a Patrick Pearse y otros luchadores irlandeses en el Alzamiento de Pascua conttra las autoridades británicas donde tuvo una participación destacada, siendo arrestado y condenado a muerte, senencia que fue conmutada pasando a un campo de prisioneros de donde salió tras la amnistía gubernamental. A partir de 1917 pasó a formar parte de la ejecutiva del patido nacionalista Sinn Féin (Nosotros Solos) y a ocupar el cargo de director de organización del IRA, ejército nacionalista organizado a partir de los antiguos Voluntarios Irlandeses, a las órdenes de Eamon de Valera. Elegido diputado por Cork, se negó a asistir al Parlamento británico y participó en la creación del Dàil Éireann (Asamblea de Irlanda).
A partir de 1919, iniciada ya la Guerra de Independencia irlandesa, encontramos a Collins al frente del ministerio de finanzas del gobierno provisional irlandés, pero al mismo tiempo ocupado en la dirección de del ejército irlandés y al mismo tiempo participando personalmente en acciones de guerrila y sabotaje contra el ocupante británico, mientras el Gobierno británico ofrecía una recompensa de 10.000 libras a quien facilitara cualquier información que llevara a la capyura o muerte del lider nacionalista. En 1921 fue designado por De valera contra su parecer, en las duras negociaciones para el nuevo y delicado Tratado Anglo-Irlandés. Una conocida anécdota recuerda que durante las sesiones al llegar Collins 7 minutos tarde y serle reprochado el retraso contestó: "Nosotros hemos estado esperando más de setecientos años, ustedes pueden quedarse esperando siete minutos". Finalmente, Collins fue el firmante y valedor del nuevo Tratado que sentó las bases del Estado Libre de Irlanda, cuyas consecuencias debido a aceptar para Irlanda ser un dominio británico fiel a la Corona a cambio de la soberanía política y vía final a la independencia y dejar la pertenencia de las provincias del norte a referendum le granjeó la oposición de una facción del IRA y de Eamon de Valera, división que propició una guerra civil en la que la facción anti-tratado fuerte en el sur se enfrentó a las fuerzas del nuevo gobierno provisional irlandés bajo el mando de Collins y sus segidores entre los que detacaba el carismático lider nacionalista Eoin O'Duffy, futuro dirigente de los fascistas irlandeses y co-fundador del Fine Gael, que defendían el Tratado como único camino hacia la independencia irlandesa y al mismo tiempo continuaron actuando en pro de la integración de las provinciasprotestantes del norte de Irlanda. Sin ambargo, y a pesar de los intentos de Collins por llegar a un acuerdo con De Valera y los nacionalistas anti-tratado, murió durante un ataque de los últimos contra su columna cuando recorría las zonas rebeldes del sur de Irlanda.
Michael Collins fue sin duda uno de los artífices de la independencia irlandesa y un luchador por su libertad. Supo aunar sus capacidades de combatiente militar, soldado político, organizador y estratega con la visión política y llevó sus puntos de vista hasta sus últimas consecuencias. Representa como en tantos otros ejemplos europeos el referente del soldado político fiel a sí mismo. Fue un patriota irlandés que hizo de su vida una aventura de lucha y conquista por lo que creía, y que vivió y murió por su pueblo.
Según se comenta en sus biografías, el tirador que acabó con su vida dijo: "Hoy he matado a un hombre".
Según se comenta en sus biografías, el tirador que acabó con su vida dijo: "Hoy he matado a un hombre".
Noventa años después de su muerte, recordamos este ejemplo.