Precisamente es a muy pocas semanas de las elecciones autonómicas, cuando Alberto Fernández advierte del efecto que la expulsión de los gitanos-rumanos de Francia tendrá en Catalunya. Ahora es cuando descubre que su reubicación en las ciudades catalanas provocará un efecto nocivo para la seguridad ciudadana de los catalanes.
Estamos en plena campaña y es normal que el PPC, que ha vivido de espaldas a los problemas cotidianos de los catalanes estos últimos cuatro años, recurra a la fácil demagogia de última hora. Los gitanos-rumanos llevan casi una década presentes en las ciudades catalanas, siendo protagonistas diarios de constantes robos, asaltos, y actos de violencia. Son los gitanos-rumanos que la regularización de inmigrantes del gobierno del PP permitió que se instalaran definitivamente en Cataluña.
Más recientemente en 2007 el gobierno italiano, gracias a la presión de nuestros amigos de la Lega Nord –miembros de la coalición gubernamental- expulsó a 30.000 gitanos-rumanos ante el hartazgo de los italianos. Todos ellos vinieron a instalarse a España, pasando por Barcelona; entonces Alberto Fernández no dijo ni una palabra.
Alberto Fernández lleva diez años sin preocuparse por el problema de los gitanos-rumanos, su partido ha sido el principal responsable de la regularización que permitió que se instalasen en España, en 2007 no dijo nada cuando miles de ellos se instalaron en varias de nuestras ciudades: ¿Por qué estas declaraciones precisamente ahora? No es difícil de responder: el PP –colaboracionista necesario con la invasión migratoria que sufrimos- está nervioso ante la próximo cita electoral; teme que –como muchos de sus dirigentes locales- gran parte de su electorado le dé la espalda y voten a la única formación que ha sido clara y rotunda desde el principio en sus posiciones contra el tsunami migratorio que está asolando a Catalunya. Y es que el PP –siempre tan carente de originalidad- hasta ha copiado los lemas de los partidos identitarios europeos –a los en tiempos normales acusa de “racistas” y “xenófobos”- para intentar evitar el transvase de votos hacia la PxC: “El lema del PP –Muchos lo pensamos, sólo algunos lo decimos” está inspirado en el que va a utilizar el British National Party en las elecciones europeas, y que también han utilizado partidos de la ultraderecha de Bélgica, Austria o el Front National de Le Pen”, ha declarado el primer secrtario de la JSC, Javi López. Pero el plagio y la impostura siempre tienen corto recorrido.
La Vanguardia y los medios oficialistas se empeñan en no hablar de la PxC en las encuestas que publican, es lógico, hoy las encuestas y los sondeos de opinión son una forma más de propaganda electoral que sólo buscan condicionar el voto. Pero todos los partidos manejan encuesta internas en las que sabemos que se sitúa a la PxC dentro del Parlament. De ahí la repentina preocupación del Alberto Fernández y el PP por los gitanos-rumanos y por la inmigración. El electorado catalán es maduro y con buena memoria, no se dejará engañar por oportunos camaleonismos de un día.
fuente: idpress
