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jueves, 23 de diciembre de 2010

PEPPE DIMITRI EN EL RECUERDO




Es un deber gozoso recordar durante los días del soslticio de invierno a todos aquellos camaradas que se fueron.  Rememorar a los que estuvieron, celebrar la vida y luchar por el futuro  son tres acciones que se unen en el rito anual de celebración de la rueda de la vida. Hemos querido dedicar este artículo de soslticio a  a un admirado camarada  que nos dejó hace más de cuatro años en Roma. Un guerrero que hizo de su vida un incansable combate y que fue fiel a la acción y a sus principios  en todas las manifestaciones de su existencia, en especial en los duros años de plomo de la Italia de los años setenta a través de la organización Terza Posizione, una época y una organización   que tenemos intención de ampliar en próximos números de la revista Europae.

Durante el mediodía del día 31 de marzo del año 2006, una motocicleta se estrella contra un coche en la romana avenida del Eur, un barrio creado por el fascismo del ventenio para celebrar la Exposición Universal y que entre los años 60 y 70 fue uno de los núcleos más activos del movimiento neofascista romano. El conductor de la motocicleta queda gravemente herido falleciendo horas despues. Su nombre era Peppe Dimitri, y se trataba de uno de los militantes más carismáticos del area.
Nacido en 1956 en Roma, se inició en la militancia política en el liceo Vivona del EUR, y con dieciseis años pasó a formar parte de la refundada Avanguardia Nazionale. Mediante su voluntad y la disciplina de la organización a la que pertenecía, Dimitri se sometió a la formación dura y espartana del guerrero: largas marchas por el campo, actividades montañeras, noches en los bosques, prática de artes marciales y la dura y peligrosa lucha que en las calles de la Roma de los años setenta vivían los militantes nacionalistas. Sin olvidar el conocimiento de la historia más antigua, las runas o el antiguo mundo de los antepasados germanos y romanos. En poco tiempo se convirtió en una admirado y apreciado responsable operativo y jefe de escuadra de Avanguardia Nazionale, un ejemplo para la militancia.
Tras la disolución de AN en 1976, Peppe Dimitri junto a  Gabriele Adinolfi, Roberto Fiore y Walter Spedicatto llegados como él de diferentes iniciativas militantes ya desaparecidas o disueltas por la acción governativa, deciden dar vida a un nuevo proyecto que aglutine y ordene a los diferentes militantes jóvenes que quedan en Roma fuérfanos de las organizaciones desaparecidas. Nace así Lotta Studentesca, embrión de Terza Posizione, un movimiento centrado en la juventud que no encontraba sus aspiraciones en un partido que en aquellos años se limitaba a sobrevivir. Se trata de la principal organización extraparlamentaria italiana durante los siguientes años. Su inéquivoca declaración de principios no da lugar a dudas: "Ni frente rojo ni reacción: lucha por la tercera posición". Se trata de una organización rompedora y vanguardista también por sus innovaciones de búsqueda espiritual y cultural y metafísica unidas a la acción política sin ningún compromiso con el poder establecido haciendo hincapié en un europeismo social y nacional frente a la colonización USA-URSS. En poco tiempo Terza Posizione se convierte en un movimiento político de referencia que con su ejemplo atrajo a millares de jóvenes italianos. En el seno de esta organización Peppe Dimitri actuó como verdadero animador y responsable de una de sus estructuras más interesantes, La Legión, destinada a formar mediante la acción y la militancia existencial a la futura clase dirigente del Movimiento y que era una verdera academia de fromación político-militar. En palabras del propio Dimitri, la Legión "debía representar y constituir una comunidad ideal. En realidad era la esencia de TP" que debía servir como instrumento para la formación del Hombre Nuevo. A través de una férrea disciplina y de una completa formación integral que lograra una alta preparación política, militar, cultural y religiosa, y mediante la militancia en este "laboratorio humano" se pretendía concretizar y actualizar con hechos  los principios tradicionales de los que se hablaba y que animaban la voluntad de Terza Posizione: "Evola hablaba de guerreros y nosotros buscábamos serlo". La acción militante hasta sus últimas consecuencias, así como las difíciles circunstancias políticas en los que se movió en una de las épocas más brutales de los últimos decenios llevaron a Peppe Dimitri a situaciones que traspasaron los límites de la legalidad, hechos que unidos a la voluntad represiva del sistema hacia un movimiento político que resultaba peligroso y molesto forzaron su detención y entrada en prisión, donde tuvo que cumplir diez años de reclusión  que motivaron el suicidio de su madre. Una nueva prueba para el militante y para la persona, que no abandonó durante esta etapa de privación de libertad su formación, sus motivaciones y sus ideales. Tras su salida de la carcel en 1988, contrajo matrimonio con Barbara Accame, hija de uno de los referentes más sociales del MSI, Gianno Accame, manteniéndose fiel a sus convicciones y actividades políticas. Durante sus últimos años fue consejero y hombre de confianza del dirigente de Alleanza Nazionale Gianni Alemanno, actual alcalde de Roma.
La despedida de Peppe Dimitri en Roma se convirtió en un tardío homenaje a la historia del neofascismo en Italia, a sus caidos, a su difícil trayectoria y a sus contradicciones. En sus funerales se reencontraron veteranos políticos del MSI, nuevos dirigentes de Alleanza Nazionale, antiguos militantes de Avanguardia Nazionale, Ordine Nuovo o Terza Posizione y los jovenes "fascistas del tercer milenio" de Casa Pound. En el rito fúnebre de despedida pudo verse al orientalista Pio Filipani Ronconi, a viejos militantes de Ordine Nuovo, a los míticos dirigentes de Avanguardia Nzionale Delle Chiae o Tilgher o a políticos del gobierno como su amigo y camarada Gianni Alemanno, actual alcalde de Roma y entonces ministro de Agricultura, o Georgia Meloni presidenta de Azione Giovani y ministra de la Juventud. Todos ellos tras un cortejo en forma de la runa Tyr presidida por su camarada Gabriele Adinolfi. Allí, en el corazón de Roma los guerreros-militantes, los camaradas, los amigos y los que sin conocerlo querían rendir un sincero homenaje a su propia historia de lucha y valor lanzaron un último presente en recuerdo y despedida del "guerrero sin sueño".
Fiel a un impersonalismo guerrero hasta el final, es difícil encontrar fotos de Peppe Dimitri. Por ello hemos querido encabezar  esta entrada con una de las fotos del acto de despedida en el que la punta de la runa Tyr está formada por sus camaradas Stefano Caponetti, Daniele Liotta y Gabriele Adinolfi haciendo el primero el saludo romano y los otros dos saludando al modo legionario, el saludo de Terza Posizione.

Camarada Dimitri, mantenemos tu recuerdo.

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